- 250 gr. de zanahorias
- 60 gr de avellanas
- 4 huevos
- 125 gr de aceite de oliva virgen
- 200 gr de azúcar moreno
- 1 cucharadita de canela
- 250 gr de harina
- 2 sobres de gasificaste
- 1 pizca de sal
Preparación (con thermomix):
1.- Pelamos las zanahorias y las colamos junto con las avellanas en la
Thermomix, le damos varios golpes de turbo hasta que esté todo bien picado.
2.- Añadimos los huevos junto con el aceite y volvemos a batir.
3.- Cuando esté todo bien mezclado echamos el azúcar y la canela y volvemos a mezclar.
4.- Por último incorporamos la harina, con los sobres de gasificante y la sal.
5.- Mezclamos todo y lo vertemos en un molde forrado con papel vegetal.
6.- Precalentamos el horno a 170º y lo horneamos durante 40 minutos. Comprobamos que está hecho pinchando un palillo y viendo que sale limpio.
6.- Precalentamos el horno a 170º y lo horneamos durante 40 minutos. Comprobamos que está hecho pinchando un palillo y viendo que sale limpio.
*Recomendaciones:
Un truco para que este bizcocho o cualquiera salga aún más jugoso, es meterlo en cuanto
salga del horno en una bolsa de plástico, lo cerramos y dejamos que se enfríe dentro de la bolsa, ya veréis que jugoso.
En este caso solo hemos utilizado azúcar glass para decorar pero también podemos añadirle la cobertura típica de estas tartas hecha con:
- 200 g de queso crema
- 50-60 g de azúcar glass
- 2 cucharadas soperas de nata para montar
- 2 cucharadas soperas de zumo de naranja
- Cáscara de naranja (opcional)
Mezclamos el queso con el azúcar glass, la nata y el zumo de naranja hasta que quede una mezcla homogénea (se puede añadir un poco de ralladura de naranja para que tenga más sabor).
Cuando el bizcocho se haya enfriado la extendemos por la superficie y lo metemos en la nevera para que coja consistencia. ¡Ya veréis que rico y jugoso!
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